Cada pieza, una parte mía
No tengo máquinas, ni fórmulas. Tengo fuego, manos, ideas y emoción. Y una necesidad profunda de crear joyas que hablen, acompañen y digan lo que a veces cuesta decir.
Lo que sientes, hecho joya
Me llamo Ana y fundé 23 MAD para transformar lo invisible en algo tangible. Las emociones, los recuerdos, las etapas que vivimos… todo eso merece llevarse encima. Por eso trabajo la plata, el ónix y otros materiales con mis propias manos. Porque no creo en las piezas hechas en serie, creo en los objetos con intención.
Diseño lento para emociones urgentes
Cada pieza que ves aquí tiene su historia: la mía mientras la diseño y la tuya cuando decides llevarla.
No hay prisa, no hay fórmulas, no hay filtros. Solo tiempo, fuego, metal y emoción.
Trabajo sola, en un taller que también es refugio. Hago esto porque me hace feliz, pero también porque sé que tú buscas algo que no encuentras en las tiendas: conexión real.
Si algo de esto te vibra, bienvenida. Ya encontraste tu lugar.
Cada pieza cuenta mi proceso
No diseñé 23 MAD para vender. Lo creé para compartir. Para conectar contigo desde lo simple, lo imperfecto y lo honesto. Así nacen estas piezas. Así empieza nuestra historia.
Diseño con intención
Cada pieza empieza con una idea real, inspirada en emociones, símbolos o historias tuyas.
Creación a fuego
Moldeo, fundo y doy forma lentamente. Sin prisa, solo con manos y alma.
Entrega directa
Recibes más que una joya: recibes algo hecho para ti, sin artificios.